Ella es
Este 23 de abril del 2024, hemos celebrado Sant Jordi de una forma muy especial.
Se trata de una colaboración altruista entre la fotógrafa Isaura Marcos, monja clarisa del Reial Monestir de Santa Maria de Pedralbes, y la poesía de Ainoa.
En las fotografías de Isaura, la amapola se convierte en un elemento artístico y sugerente.
Un elemento que evoca a la reflexión e invita a la contemplación. Y en uno de estos retratos, aparece fotografiada también Ainoa, junto a una de estas efímeras y especiales flores.
A raíz de este encuentro entre artistas, de estas imágenes, y del contemplar de esta flor, Ainoa ha creado una colección de poemas inspirados en la obra de Isaura. Y de esta colaboración, ha nacido el artículo que el día de Sant Jordi, ha quedado publicado en LA VANGUARDIA digital. Para verlo, podéis acceder a través del siguiente link: https://www.lavanguardia.com/participacion/las-fotos-de-los-lectores/20240423/9600998/poesia-amapola.html
Para conocer más sobre la obra de Isaura, podéis buscar sus libros publicados de fotografía, y leer el siguiente enlace: https://es.wikipedia.org/wiki/Isaura_Marcos_S%C3%A1nchez
A continuación, encontrareis la colección de poemas escritos por Ainoa para la ocasión.
Fotografía: Isaura Marcos (2024)
Ella es
I
Ella es.
Es enérgica.
En compañía complaciente.
Curiosa y exigente.
Singularmente
artista y fotógrafa perenne.
Alma rebosante de juventud,
de inquietud,
y a la vez
tan feliz en plena solitud.
En el silencio y el recogimiento.
En el sentirse
estela fugaz,
del libre pensamiento.
Ella es.
II
Despierta, inquieta
y meticulosa.
Apasionada y tan curiosa!
Sus ojos alcanzan la mirada,
del que mira.
Y agazapados los pensamientos,
delinean el trazado alzado al viento.
Palabras malabaristas
se abren paso
y un torrente de luz y vida,
cruza los caminos.
Nubes de tiempo,
regalos del cielo.
Un puñado de amapolas,
y la felicidad de los viajeros.
Un puñado de achicorias,
y el encuentro con sendos recuerdos.
III
Me recuerda su hacer,
al placer de estar sentada;
el placer de respirar,
el de contemplar...
... inspirar y soltar.
Abrazar.
Y escuchar la voz del silencio,
la canción del sol.
Y la ligereza al despertar.
Danzar.
Sin tan solo pestañear.
Sencillamente,
el presente cual regalo aceptar.
IV
Volátiles
son tiempo entre colores,
pétalos y recuerdos.
Frágiles
son luz y sentimiento,
un camino de recogimiento.
Flores,
seres etéreos del tiempo,
eternos y efímeros,
al mismo momento.
El milagro acontecer,
y en un susurro florecer.
V
Palabras y pétalos.
Delicada la mirada
contempla.
Del tiempo,
un susurro.
Del ser,
un anhelo.
Palabras y pétalos;
confluyen los recuerdos.
Paisajes soñados
en otros cielos encontrados.
Hoy, luces en verso.
Estrellas fugaces,
en más de un firmamento.
Despertad, y amad al viento.
Camino abierto.
Luces en verso.
VI
Efímera.
Danzan las manos,
los ojos anhelan.
Palabras de tiempo
y luces a contratiempo.
Su reloj se desvanece
mientras tu mirada acontece.
Procura un atento presente,
que presta su luz
efímera se escribe
al son del laúd.
Piedras de antaño,
hoy con tintes de azulado.
Permitid al viajero su regazo,
que amapola,
hoy es el regalo.
VII
El tiempo no existe.
Silencio en colores.
Ventana de luz
y amapolas a contraluz.
Sin sol ni viento,
quién cogiera el momento.
Azul celeste eterno,
noche de días
y canto de alegrías.
Cristales de tiempo,
hoy espejos
ayer recuerdos.
Muros de rimas,
pisadas y sonrisas.
Hoy hechas ayer.
Mañana vueltos,
hilos del acontecer.
VIII
Cuentan las palabras
leyendas y edades.
De humanos
vestidos de antaño,
de planetas venidos de Urano.
Lejanos,
a la vez que cercanos.
Movimientos lunares
de astros congregados.
Dispersa su luz
sueña resuelta.
Con ese color,
de juventud y quietud.
Tiempo sin pausa
y segundo que avanza.
Pétalos de amapola
y momento que se añora.
Escríbeme un verso
para recordarte en pensamiento.
Flor del ayer,
mañana en mi recuerdo.
Fugaz recogimiento.
IX
Luces de papel
golondrinas color pastel,
ideas sin divergencias,
los caminos abren puertas.
Estelas, en mar y sal,
envueltas.
En colores de lápiz
y nuevas contiendas.
Lunas de seda
y lágrimas de aguas marinas.
También mariposas submarinas.
Y cristales de otras vidas.
Del texto: Ainoa Soler Hoyo
Barcelona - Abril 2024
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